La corrupción e impunidad son fenómenos sociales que han tomado carta de ciudadanía en la mayor parte de los países centro y suramericanos.
Estudios no académico – científicos la valoran anualmente entre el 5 y 15 % del P.I.B. según el país y el grado de afianzamiento de las mismas.
La metodología empleada sigue el mismo patrón: saqueo de los bienes del Estado mediante contratos amañados, compras sobrevaloradas de bienes y servicios, pago de bienes o servicios no recibidos o de inferior calidad a lo requerido y la ultima tendencia: concesionamientos onerosos que solo benefician a quien lo recibe y a quienes lo otorgan.
Esto repercute negativamente en la calidad de vida de los ciudadanos, especialmente cuando se trata de la adquisición de medicamentos y servicios médicos, como ser el caso del I.H.S.S. en Honduras.
Es evidente, por el nivel de impunidad imperante, que la institucionalidad de los países afectados por estos fenómenos sociales no funciona. Lógico: los encargados de aplicarla son colocados en esas posiciones por quienes saquean al Estado.
Igual como con la metodología, el perfil del corrupto centro y sur americano es el mismo:
1- Invoca frecuentemente a Dios.
2- Necesita hacer creer a los demás que es honrado.
3 – Le teme a que los medios de comunicación lo cataloguen como corrupto.
4- Teme perder su visa americana.
5- La mayor parte de su riqueza mal habida la tiene en bancos y propiedades en Estados Unidos y Europa.
Lo anterior confirma que la solución a este problema pasa definitivamente por apoyo externo, especialmente de nuestro mayor socio comercial y aliado estratégico; Estados Unidos de América.
PROPUESTA
La forma mas rápida, efectiva y económica de ayudarnos seria:
INCLUIR EL DELITO DE CORRUPCIÓN EN EL KINGSPIN ACT.
Hemos visto que este instrumento legal funciona y es contundente en el castigo a quienes se les aplica y dado que la corrupción y la impunidad en nuestros países son tan dañinos como el trafico de drogas ¿ por que no incluirlos como delitos penalizados por dicha ley? Estamos seguros que sus resultados serian inmediatos y positivos.
La próxima reunión de las autoridades norteamericanas con funcionarios y empresarios centroamericanos, que se celebrara en Miami la próxima semana, para discutir temas de la prosperidad, seria un foro ideal para el planteamiento de esta propuesta.